Viajar a Mauricio

Mauricio

Viajar a Mauricio es visitar una isla situada en el océano Índico de poco más de 2.000 km cuadrados. En ella viven 1,2 millones de personas y es independiente desde el año 1968 cuando logró su propia autonomía ante Reino Unido, país que colonizó unas décadas antes sus territorios. Incluye otras pequeñas islas como San Brandón o Cargados Carajos, Rodrigues y las Agalega. Árabes en la Edad Media y portugueses a principios del siglo XVI fueron los primeros en visitar las salvajes islas, a las que más tarde llegaron los holandeses y franceses. Los primeros le pusieron su nombre actual y los segundos estuvieron en ellas más de 200 años, sin embargo las guerras napoleónicas hicieron que éstas fueran cedidas a Reino Unido, sus últimos administradores.

Forman parte de las llamadas Islas Mascareñas y está dividido en nueve distritos y se encuentra cerca de otras famosas Islas, las Reunión. Mauricio tiene alguna de las playas más paradisíacas del mundo y su agua goza de una temperatura de más de 23º C durante todo el año. Su agradable clima, no tan caluroso como otros países vecinos, le hacen disfrutar de un turismo perenne durante todo el año lo que ha propiciado a que sea considerada también una de las islas más multiculturales del mundo, dónde decenas de personas de todo el mundo la eligen como su lugar y remanso de paz para vivir. Su idioma es el inglés, el francés y el criollo. Su economía se basa en el mismo turismo y en el sector azucarero, del que es gran exportador. También la banca y la construcción están en aumento, aunque sin las grandes proporciones que en Occidente. El sector servicios y la agricultura de subsistencia son otros factores a tener en cuenta.

Su capital es Port Louis con cerca de 150.000 habitantes y, además, una de las ciudades más antiguas del país, fundada por franceses en 1735. La Compañía francesa de las indias orientales fue clave para la construcción de las fortificaciones y el puerto de la ciudad y cuentan que su nombre se debe al monarca Luis XV. Es el centro comercial económico y político del país y alguna de sus bazas económicas son la industria textil, la química, la farmacéutica y el cultivo del café.  Viajar a Mauricio es visitar Port Louis y algunas zonas claves como el Aapravasi Ghat - un conjunto de edificaciones declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco -, el museo de la ciudad, el Caudan Waterfront, el mercado central, la ciudadela, el barrio chino, el campo de marte, el teatro, el museo de historia natural, la bahía de Tombeau, la mezquita de Jummah, la pagoda china, el hotel du Gouvernement, la mezquita Al-Aqsa en Plaine Verte, con más de 200 años a sus espaldas.... También hay otros sitios de interés como  el jardín botánico de Pamplemousse, Tamarin, Albion, Pereybere, la Gran Bahía o Souillac, entre otros.

Llevarse un recuerdo de Mauricio es muy fácil. Típicas son sus tallas en madera, maquetas de barcos, tejidos bordados, cestería, especias...y a la hora de comer, pescados, arroces, pollo y mariscos varios por doquier. Algunos platos populares son el paratha, rottis, rougaille, bizcochos con mermelada, samoussa, pescado sofrito de vinagre y mostaza, ensalada de los millonarios, tallarines, arroz con especies o pescado... una cocina con claras influencias asiáticas. De postre sus frutas como la papaya o el mango, y para beber, cócteles de frutas exóticas, cervezas, ron, lassi -hecha con yogur y agua- y alouda, un tipo de infusión.