Viajar a Canadá

Canadá

Viajar a Canadá es visitar al país más al norte del continente americano y bañado por tres océanos, el Pacífico, el Ártico y el Atlántico. Tras Rusia, es el país más extenso del mundo y, también, uno de los países más estables y más prósperos. Su idioma es el inglés, aunque tiene una zona francófona. En la totalidad del país más del 20% de los ciudadanos hablan francés, lo que le ha valido a esta lengua para ser designada también como lengua oficial. Los amerindios fueron sus primeros pobladores y hay pruebas de que es un país habitado desde hace más de 26.000 años. Los colones europeos, sobre todo británicos y franceses, han marcado su historia y su renovación cultura así como su estilo de vida. Se independizó de Reino Unido en la segunda mitad del s. XIX aunque la reina Isabel II sigue siendo su jefe de gobierno, la iglesia cristiana - católica es la predominante y su geografía se divide en 10 provincias más 3 territorios. Limita con Alaska al norte y con Estados Unidos al sur, sus inviernos son duros -sobre todo en el norte- y los veranos no suelen ser muy calurosos, predominan en la costa un clima más suave durante buena parte del año. Es uno de los países del mundo con más extensión en bosques, lo que le favorece para poseer una flora y fauna destacada. Los osos polares, coyotes, pumas, osos, lobos y castores son alguno de sus animales más característicos. Entre los puntos más fuertes de su economía están sus exportaciones en gas natural y el zinc y el uranio, del que es máximo exportador. El sector minero, automovilístico, aeronáutico o el petrolífero, son otras de sus bazas. Su capital es Otawa, aunque agrupa a diferentes e importantes ciudades como Vancouver,  Montreal, Calgary, Toronto o Quebec, entre otras.  Otawa es  una de las ciudades más seguras del país y fue escogida por la Reina Victoria como capital por su neutralidad idiomática. Se sitúa en las desembocaduras del río Rideau y del canal Rideau, su clima se caracteriza por temperaturas bajas durante todo el año y posee 3.230 hectáreas de parques.

Visitar la capital es observar un sinfín de edificios elegantes y emplazamientos dignos de fotografiar, destaca el gran parlamento del país, el museo canadiense de la civilización, la colina del parlamento, la galería nacional, el parque confederación o el de Jacques Cartier, el museo de la aviación, el de naturaleza o el de la guerra, mosaika, la basílica de Notre Damme, la torre de la paz, arboretum, el Rideau Hall, la Laurier House, el museo de agricultura, confederation square, la gran compañía teatral de Canadá, la corte suprema, el royal Canadian mint, east block, la famosa calle Preston, el centro de congresos, scotiabank place, el distrito financiero y sus grandes edificios gubernamentales, la céntrica calle Sparks, el espacio natural Greenbelt o el emblemático hotel Chateau Laurier, entre otros lugares. Otra de las opciones, es visitar su ciudad más conocida y más turística, Montreal. Tiene rincones tan famosos como la plaza Jean-Paul Riopelle, el lago de los castores, su propia catedral de Notre-Dame, el oratorio de san José de monte real, su casco antiguo, Chinatown, parc du mont-Royal, el jardín japonés, el museo de bellas artes, la calle de los artistas, el edificio del mirador, la biblioteca nacional, jardín botánico, la villa imaginaria, el parque Émilie-Gamelin, la plaza de armas o la villa olímpica, son solo algunos ejemplos.

Viajar a Canadá es comprar algún típico recuerdo para traérselo a casa. Sus esculturas y pipas son muy populares, también pieles, joyas, osos con la bandera del país o gorros y palos de hokey. Y a la hora de comer, hay que tener en cuenta que nos encontramos con una comida entre la francesa y la estadounidense, con platos típicos de ambas y mucha carne. Algunos manjares típicos son la tourtière -un pastel de carne-, sándwich con pastrami, poutine -patatas fritas con salsa y requesón-, arenques con vinagre, el boeuf fume -sandwich con pepinillo, mostaza y ternera en pan negro-, el jarabe de arce -muy famoso, sobre todo en las tortitas que es uno de los postres más consumidos-, plato chino con carne picada, maíz y puré de patata, carne con judías y patatas y pudding con caramelo, como otro postre popular. Y para beber, el vino autóctono y el café son muy consumidos.