Viajar a Vietnam

Viajar a Vietnam es trasladarse a la histórica región de la península de Indochina, en el extremo sureste del continente asiático. Gobernada por diferentes dinastías chinas durante siglos, a mitad del s. XIX pasó a manos de Francia hasta lograr su independencia total de este país a mediados del s. XX. Posee extensas costas y en su haber puede presumir de una de las poblaciones más extensas del mundo, 91 millones de personas -en los últimos 40 años, ha doblado su población-. La guerra contra Estados Unidos ocurrida entre los años 60 y 70, marcó y mucho la historia más reciente de este país, uno de los más desarrollados del sudeste asiático. De gran naturaleza -los árboles copan el 30% del total del territorio-, el país está dividido en 8 regiones y posee una biodiversidad única en el mundo. En sus adentros, aglutina una gran cantidad de animales (osos, panteras, tigres, elefantes, monos, cocodrilos, más de 700 tipos de aves y 450 especies de peces...) que le hacen ser uno de los 20 países con mayor biodiversidad del mundo. Un tipo de budismo, el conocido como mahayana, es practicado por la mayoría de sus gentes y el vietnamita -que usa el alfabeto latino- es el idioma oficial, aunque una parte conoce también el francés. Su economía destaca por ser una de las de menor desempleo de toda Asia -con una mano de obra barata- y su pobreza sigue disminuyendo. Algunos sectores importantes son la agricultura -que emplea al 60% de la población y contribuye con el 22% del PIB-, la manufactura, la pesca, comercio minorista, minería, construcción, energía y un turismo que, aunque menor, sigue creciendo. Sus ciudades principales son Hanói, la capital, y Ciudad Ho Chi Minh, la más poblada.

Alguno de sus enclaves más turísticos está en relación directa con estas dos ciudades, pero no solo ahí. El mágico lago Hoan Kiem, el mausoleo y la residencia de verano de Ho Chi Minh, la pagoda del perfume, el templo de la literatura, la impresionante naturaleza de Hoa Lu, el teatro de marionetas de agua Thang Long, el río Ngo Dong, la turística playa de Cua Dai, la pagoda Tran Quoc, el fastuoso templo Den Ngoc Son, el mercado, los alrededores mágicos del rio Hoan Kiem, paseos en rickshaw, el barrio viejo u Old Quarter, el museo de etnología, el templo Dinh Tien Hoang, el templo de la literatura, el monumento Chua Mot Cot o el de Ly Thai To, las marionetas en el agua, la casa zancuda, la pagoda de Chua Tay Phuong, el templo de Quan Thanh o el de Vam Mieu, la isla de los gallos o el lago de Ho Tay son solo algunos de los ejemplos que su capital, Hanói, tiene preparados para el turista. En Ciudad Ho Chi Minh, destacan enclaves como, por ejemplo, sus calles céntricas siempre llenas de curiosos y vecinos, los túneles de Cu Chi, la catedral de Notre Dame, el museo de la guerra, el palacio de la reunificación, los canales de Culao Anbih, la pagoda del emperador de Jade, el edificio de correos, la plaza de Hai Thung  Lan Ong, la rotonda de Nga Sau Cong Hoa, el templo de Le Van Duyet, Skydeck Saigon, la pagoda de Vinh Nghiem, la sede del comité popular, el museo de historia de Vietnam, la avenida de Le Loi, la zona de Pham Ngu Lao, el bosque de caucho, el palacio de la opera o la plaza de Lam Som. Otras ciudades turísticamente importantes son Chau Doc, Hue, Hanoi y Hoi An, llenas de templos, grandes lagos y lugares emblemáticos en la historia del país.

A la hora de realizar las compras típicas por este país, debemos tener en cuenta cuales son algunos de sus signos de identidad, por ejemplo productos de seda, sus túnicas tradicionales o ao dai, pulseras artesanales hechas con reductos de animales, budas, cajas barnizadas, sombreros, papel hecho a mano, productos hechos con bambú y un largo etcétera que dan fe de una tradición milenaria. En su gastronomía, sobresale el uso de hierbas, vegetales y pescados. Las salsas y los alimentos frescos son otras de sus características esenciales. Algunos de sus platos típicos son el pho bo -una sopa de fideos con ternera, el pho ga con pollo, el bun oc con fideos, chile y caracoles, banh mi -una especie de bocadillos-, hot pot o estofado, bun bo hue que es una sopa de fideos con manitas de cerdo, stir fried con verduras, carne de perro o el goi cuon -una especie de rollito para época estival-. En los postres, la fruta del dragón, el maracuyá o el bizcocho  de phu the. Y para beber, sus té entre los que destacan el tra da.