Viajar a HAMBURGO

Hamburgo

Viajar a Hamburgo es trasladarse al norte de Alemania, una importante ciudad de esta parte de Europa en la que llegan a residir casi 5 millones de habitantes en su área metropolitana. Característicos son sus dos ríos, el Alster y el Elba, está divida en siete distritos y sus temperaturas son de las más frías del país, con inviernos bajo cero y veranos que apenas superan los 20 grados. Se ubica en la península de Jutlandia y cerca de mares como el del Norte, el Báltico y la región de Escandinavia, y en su geografía también sobresale el Parque nacional del mar de Wadden y la isla  Neuwerk, entre otras. Aunque se cree que Hamburgo era un lugar de paso en el continente desde hace miles de años, sus primeros habitantes no se dieron hasta el año 800 d. C.

Las misiones católicas y la figura de Carlomagno están estrechamente vinculadas a su fundación. Pero también los continuos ataques vikingos e incendios que sufría tanto ella como otras regiones de su entorno que paralizaban su crecimiento. En el siglo XIII, Hamburgo vivió una época de florecimiento económico gracias a su alianza comercial con Lubeck y ser una de las fundadoras de la Liga Hanseática. En el siglo XVI fue una de las ciudades clave en corrientes religiosas como el luteranismo y el protestantismo, y fue un estado independiente en la Confederación Germánica, la Federación Alemana del Norte, el Imperio Alemán y durante el período de la República de Weimar. Fue un feudo importante en la Alemania nazi y sufrió importantes daños en la II Guerra Mundial. El telón de acero, a sólo 50 kilómetros al este de Hamburgo, separó de la ciudad la mayor parte de su interior y redujo aún más el comercio mundial de Hamburgo. En su economía, su puerto es vital para el desarrollo de la ciudad, tanto a nivel turístico como industrial y destacan sectores como el acero, aluminio, cobre, naviero y el financiero. Tiene uno de los mejores sistemas públicos de transporte de toda Europa y una intensa vida cultural donde se contabilizan más de 40 teatros, 60 museos y 100 lugares de música y clubes.

Los lugares de interés de los que hace gala esta ciudad son innumerables. Viajar a Hamburgo es visitar algunas iglesias importantes como la de San Nicolás, San Miguel, San Pedro, San Jacob y de Santa Catalina, Chilehaus, puentes como Köhlbrandbrücke, Freihafen Elbbrücken, Lombardsbrücke y Kennedybrücke, parques como Stadtpark, el cementerio Ohlsdorf, Planten un Blomen y Stadtpark, Laeiszhalle, el barrio alternativo de Sternschanze, la filarmónica de Elba, importantes teatros como Hamburger Schauspielhaus, Thalia, Kampnagel, el Inglés, la Galería de Arte y la Galería de Arte Contemporáneo, el Internationales Maritimes Museum Hamburg, el Miniatur Wunderland o el Museo de la Ciudad de la Emigración BallinStadt, jardín botánico, el monumento a Otto von Bismarck, Alster Arkaden, Speicherstadt, Deutsches Schauspielhaus, el barrio de St. Pauli y su calle Reeperbahn, el museo de cera, el ayuntamiento o el barrio alternativo de St. George merecen la pena ser visitados.